viernes, diciembre 24, 2010

1981, la foto de navidad


Esta fue la foto de familia que como candidato presidencial del Partido Revolucionario Dominicano, Salvador Jorge Blanco, mi padre distribuyó en la navidad de 1981 en miles de postales en todo el territorio nacional. Han transcurrido 29 años desde que nos tomamos esa foto, y todavía cuando visito hogares en nuestro querido país hay dominicanas y dominicanos que la conservan como recuerdo. Esa foto fue tomada en el patio de la casa, en la terraza. El verde de la enredadera con sus flores blancas y el color negro de la puerta de hierro son inconfundibles. Mi padre con su tradicional traje de mil rayas y su sonrisa característica, mi madre muy elegante como siempre, mi hermana Dilia, entrando a la adolescencia y yo iniciando la secundaria.

Mi familia es la sencillez hecha palabra. He estado, desde entonces, en muchas campañas y he visto muchas fotos similares, pero puedo decir con orgullo que esa fue la primera foto de familia en una campaña electoral. Recordar que para esa época, el presidente Balaguer nunca tuvo familia conocida, y la familia del presidente Antonio Guzmán estaba integrada por hijos adultos. Es decir, esta foto colocó a la familia en el centro de la política. Hay un antes y un después a partir de esta foto.

Esta es mi primera navidad en condiciones excepcionales. Mi madre no estará con nosotros, como ha sido en los últimos tres años. Mi padre cumple hoy 35 días en estado de coma, luchando por vivir. Hoy estaré a su lado, escuchando música clásica, leyendole algunas páginas de la última novela que estaba leyendo el día antes de su caída, contándole sobre las actividades de la familia, hablándole de los proyectos del próximo año, y lógicamente, resultará inevitable traer a la memoria los recuerdos de su vida. Feliz navidad.

2 comentarios:

Ruth Sanchez dijo...

Leo con muchísimo interés sus apuntes que son de muchisimo valor para mi. Vivo en los EEUU desde que tengo quince anos. En los anos ochenta, mi primo hermano Albert Giraldi me presento a su padre y madre en un almuerzo en la casa de La Romana. Mi primo Albert admiraba a su padre y madre como personas de integridad, valor y valentía.
Mis mejores deseos para usted y su padre en el día de hoy. siga compartiendo su amor y su lealtad con su excelentísimo padre.
Ruth E. Sánchez

Juanma dijo...

Excelente relato de amor filial, espero que tu padre este en este momento junto a tu madre en los jardines del Cielo, donde no hay sufrimiento donde no hay persecuciones...Paz a sus restos y todos ustedes la paz de Cristo.