sábado, junio 20, 2009

Signos de esperanza


La Magistrada Sara Henríquez Marín, Juez Presidenta del Tribunal Contencioso Tributario y Administrativo, con su decisión de suspender la licencia y los trabajos de construcción de la Cementera en los Haitises, acaba de demostrar lo importante que es tener instituciones fuertes que respeten la ley y los procedimientos. El caso no ha concluido, pero su sentencia, en medio de un país caracterizado por la imposición de los deseos y las voluntades del poder, enaltece la sagrada misión de juzgar.

Para el récord, aquí está mi posición sobre este caso.

La foto es de Diario Libre.

ACTUALIZACION: Ante la inquietud de un amigo, que leyó este apunte, sobre si la decisión de la Juez es apelable, confirmo que, dado que se trata de una decisión cautelar, que es mientras dure el conocimiento de un proceso administrativo, la misma es ejecutoria, y no está sujeta a apelación, de conformidad a la Ley No.13-07 que crea el Tribunal Contencioso Tributario y Administrativo.

2 comentarios:

Jaime Frias dijo...

HOLA SEÑOR SECRETARIO GENERAL,
MUY BIEN POR ESTE TRIBUNAL, Y A PREPARARSE PARA EL JUICIO DE FONDO, NO PODEMOS PERMITIR QUE TAMBIEN EL PLD ACABE CON NUESTROS RECURSOS NATURALES.

Karina Luciano dijo...

Esta sentencia le da una galleta sin manos a Jaime David Fernández Mirabal. Su futuro político es muy oscuro en este momento.