viernes, abril 08, 2011
Vikingos en la política
Los republicanos quieren destruir al presidente Barack Obama aunque ello implique que 800,000 empleados públicos deban quedarse en sus casas, si antes de la medianoche de hoy no se produce un acuerdo que evite el cierre de la corporación más grande del mundo: el gobierno de Estados Unidos de América. En el 1995, los republicanos le hicieron lo mismo al presidente Bill Clinton, que había perdido el control del Congreso. Veintiún días permaneció el gobierno americano, cerrado o como dicen en inglés "shutdown". Pero, lejos de tener consecuencias negativas para Clinton, el estilo vikingo de los republicanos le resultó perjudicial en las mesas electorales. Clinton fue reelecto. Si no logra un acuerdo, Obama pasará estos días difíciles, pues obviamente el cierre afecta todas las políticas del gobierno. Hasta el festival de los cerezos en Washington se suspendería, por citar un evento hermoso que atrae miles de turistas. Al final, se logrará un acuerdo, y se repetirá la experiencia de Clinton en 1995. El efecto se traducirá en un boomerang contra los republicanos, y Obama se las cobrará en las elecciones de 2012, ganando la reelección. El poder es más allá que un juego de ajedrez. Seguiré luego con este tema.
(Viñeta de The Economist, vista aquí).
ACTUALIZACION: Dos horas antes de la medianoche del viernes, Obama y los republicanos llegaron a este acuerdo que evitó el cierre del gobierno.
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