lunes, noviembre 09, 2009

El Muro derrumbado por la democracia



Lamentablemente no conozco Berlín, ciudad a la que admiro desde muy temprana edad. Quien primero me habló sobre el Muro de Berlín fue mi primo, Salvador Jorge Pérez, cariñosamente "Manito", quien casó con una ciudadana alemana, y me contaba sus peripecias en el Checkpoint Charlie. Para la época del relato, en los setenta, existían muy pocos matrimonios dominíco-alemanes, por lo que me resultaba curioso y aleccionador escuchar todas las historias de mi primo Manito, particularmente lo que significaba el Muro de Berlín.

Hoy se celebra el 20 aniversario de la Caída del Muro de Berlín, símbolo de la división en Alemania, entre el Oeste y el Este, entre democracia y comunismo, y es una fecha que, aunque desde la distancia, desde tan lejos en el Mar Caribe, no puedo pasar por alto. Desde que Ronald Reagan exclamó: Sr. Gorbachov, abra esta puerta, era cuestión de esperar. Recuerdo que el 9 de noviembre de 1989, recién llegado de la universidad en Santo Domingo, ví las imágenes por CNN, y me conmoví, al ver la gente derrumbando ese Muro, con alegría, con canciones, con libertad. A partir de esta fecha, la historia es conocida: Toda Europa del Este se desplomó. Los países grises, cuyas dictaduras y regímenes totalitarios solo habían impuesto el color gris, se convirtieron en países de colores y de alegría, con sus virtudes y defectos.

Si bien los países democráticos han asimilado la experiencia del Muro de Berlín, todavía quedan otros muros, como el que se ha construido en Israel, o como el que se ha construido entre la frontera de Estados Unidos y México. Quedan también los muros que no se ven, que son aquellos de la discriminación, de las desigualdades, que están construidos en muchos sitios y lugares, que afectan a millones de personas. Nos queda por lo tanto, aprendida la lección del Muro de Berlín, de que nunca jamás vuelvan a construirse estos muros, y que los que existan, puedan ser derribados por la racionalidad y la libertad.

1 comentario:

Ferzvladimir dijo...

Esos eran los planes de estados unidos, dar vueltas, distraer, llegar a falsos acuerdos, hasta que llegara la fecha de las elecciones presidenciales y tomar la excusa de realizarlas, para asi resolver el conflicto interno, sin restituir a zelaya.

Siento lastima por ese pais, cuando pase algo parecido, pasara lo mismo, nada de garantias constitucionales de ningun tipo; y mucho menos contar con la ayuda de la Oea u otra entidad internacional. roguemos a Dios que nunca pase eso en dominicana.