jueves, junio 03, 2010

Una contrarreforma opaca

Uno de los pasos más significativos que ha dado la República Dominicana en la adecuación y modernización de los instrumentos jurídicos corporativos, lo constituyó la nueva ley de sociedades comerciales, la cual en, honor a la verdad, desde que que fue aprobada por el Congreso Nacional y promulgada por el Poder Ejecutivo, no ha podido ser puesta en ejecución plena, pues ha sido prorrogada su entrada en vigencia en más de dos oportunidades. La razón oculta de la resistencia a que la misma se aplique ha sido develada con la introducción de un nuevo proyecto de ley que modifica y deroga la nueva ley de sociedades comerciales. Es decir, la ley que aún no es ley vigente ya no se quiere que funcione, sino que sea una nueva ley. Una contrarreforma opaca, oscura, discutida sin mayores niveles de transparencia. Así no se construye la institucionalidad.

No hay comentarios.: