domingo, octubre 05, 2008

¿Reforma constitucional o una nueva Constitución?



(Comparto mi articulo publicado en El Nacional)

Desde la ruptura del orden constitucional en el 1963, que sepultó la Constitución de 1963, no hemos vuelto a tener una Constitución que sea el resultado de la participación de todos los sectores de la vida nacional. Aun cuando en noviembre de 1966, se adoptó una nueva Constitución, la misma no fue la expresión soberana de las fuerzas sociales y políticas. Luego, a esta Constitución, se le introdujeron las reformas de 1994 y de 2002. En otras palabras, la actual Constitución tiene su raíz en el 1966, con las enmiendas producidas en momentos coyunturales de la vida nacional.

Las referidas enmiendas fueron aprobadas por el Congreso Nacional, reunido como Asamblea Revisora, en virtud de las disposiciones de los artículos 116, 117 y 118 de la Constitución de la Republica. Sin embargo, el proyecto presentado por el Presidente Leonel Fernandez no se trata de enmiendas o modificaciones parciales a la Constitución. Se trata de una nueva Constitución. Cabe preguntarse, entonces, si la Asamblea Revisora tiene facultad para aprobar una nueva Constitución, cuando el Articulo 118 de la Constitución es muy claro al afirmar que la misma se reunirá para “resolver acerca de las reformas propuestas”.

El tema es de suma trascendencia. Incluso, invito a leer en la Consulta Popular, la Consultoría de los Juristas Españoles, coordinados por Pedro Gonzalez Trevijano y Enrique Arnaldo, particularmente el “Titulo XIII: Reformas Constitucionales”. Es obvio que, ante esta disyuntiva, la tendencia a nivel mundial, ha sido que las reformas que producen lo que, estos juristas españoles denominan, “la quiebra constitucional”, como es la que pretende el presidente Fernandez, sea conocidas y decididas por Asambleas Constituyentes, que confieran la legitimidad de las nuevas estructuras y poderes constitucionales, y las “revisiones constitucionales”, que consisten en enmiendas y modificaciones parciales a la Constitución, que efectivamente pueden ser conocidas por la Asamblea Revisora.

Algunos sectores que, antes de que el presidente Fernandez depositara el proyecto de reforma constitucional, respaldaban públicamente la Constituyente como mecanismo idóneo para modificar íntegramente la Constitución, hoy, en un viraje inexplicable de 360 grados, han variado su posición a favor de la Asamblea Revisora. Argumentan estos sectores que, la realización de la Consulta Popular (auspiciada por el gobierno), subsana la ausencia de la Asamblea Constituyente, por haberse hecho (la Consulta Popular), con la participación de las fuerzas sociales del país. Para fines de este articulo, aceptare este argumento, aunque no lo comparto.

Resulta que, ha quedado demostrado, que los resultados de la Consulta Popular no fueron vinculantes al proyecto presentado por el Presidente Fernandez. Una simple comparación entre ambos textos, arroja que el Presidente Fernandez se olvidó por completo de la Consulta Popular, tal como es el caso de la Constituyente, la cual, un 62% de los consultados la favoreció.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El presidente Leonel Fernández se burlo del resultado de la consulta y la acomodo a sus intereses personales.
El PRD y la sociedad civil deben impedir los propósitos continuistas de Leonel.

Anónimo dijo...

Hola Lic. Orlando, ese viraje inexplicable de 360 grados sobre la posición que han tomado algunos, se debe a que el presidente Fernández Reina sabe hacer cambiar a mucha gente de opinión, utilizando los recursos del estado.